Junto a la sede de Sagardoextea, se encuentra el Museo y Centro de Interpretación de la Sagardoa, que encierra todos los secretos de esta fruta (manzano), según dicen, la más extendida y cultivada del mundo. Astigarraga, en Gipuzkoa, es la auténtica capital de la sagardoa. Sagardoetxea ofrece el programa perfecto para una jornada de ocio activo: un día de sidrería.
La «sagardoa» (sidra en euskera) está rodeada de ritos y costumbre sociales que hacen de su degustación un momento único. Por ello, en Gipuzkoa se ha creado un Centro de Interpretación y Museo de la Sidra Vasca que lucha por realzar este producto gastronómico.
Es un espacio al aire libre, un atractivo paseo en el que se aprecia de una forma dinámica y pedagógica la cultura de la manzana. En torno a él se se desarrollan diversas actividades demostrativas, enseñanzas, injertos y cultivos destinados tanto a profesionales como a jóvenes y otros visitantes. La temporada de sidrerías se desarrolla principalmente en invierno (de enero a abril)
Se pueden visitar diferentes áreas en las que se muestran las variedades de manzana de sidra presentes y utilizadas en Euskadi (Aritza, Errezila, Gezamina, Manttoni, Udare, Marroi, Urtebi Haundi, Urdin y Verde Agria). Un tolare en el que apreciar el prensado de la manzana, demostraciones de elaboración de sagardoa, historias y curiosidades en torno a este fruto y sus variedades autóctonas, apreciadas en su contexto natural, conforman aspectos destacados de un recorrido que merece la pena realizar con detenimiento.
El menú tradicional de sidrería es similar en la mayoría de las sagardotegis, aunque en alguna ocasión se pueden encontrar pequeñas variantes que no alteran en ningún sentido el significado y la idiosincrasia propia de esta experiencia. El citado menú está compuesto por: tortilla de bacalao, bacalao frito con pimientos verdes, chuletón y queso con membrillo y nueces como postre.
